La energía solar eólica es una corriente de partículas cargadas que fluyen desde el Sol, o de cualquier estrella, en todas las direcciones. La energía eólica está compuesta principalmente por protones y electrones libres (plasma) con energías del orden de 1 keV (kilo-electrón-voltios).
Este viento muy enérgico, pero solar es generalmente inofensivo debido a su baja densidad. La energía solar eólica se extiende hacia el exterior alrededor de 100 UA (unidades astronómicas, las distancias Tierra-Sol), aproximadamente tres veces más lejos del Sol que la órbita de Neptuno, momento en el que choca con el medio interestelar. La región donde el viento solar es dominante es conocida como la heliosfera.
No se conoce completamente cómo la energía solar eólica se escapa del Sol y viaja hacia el exterior. Esto se debe en parte a la temperatura extremadamente alta de la corona y la capa de la atmósfera del Sol, que oscila entre 1 y 3 millones de grados Kelvin (grados Celsius 1 y 3 millones, 1,8 y 5,4 millones de grados Fahrenheit), alcanzando máximos ocasionales de 10 millones de grados Kelvin.
La alta temperatura de la corona es una cuestión sin resolver en la física misma, pero la velocidad del viento solar, ya que es expulsado desde el Sol - entre 400 y 700 km / s - es otro misterio. Incluso teniendo en cuenta la alta temperatura de la corona, con estas partículas se debe conseguir un poco de energía cinética adicional de algún lugar para escapar del Sol a la velocidad que lo hacen. Los campos magnéticos generados por electrones libres pueden contribuir a la aceleración de protones de distancia del sol.
La energía solar eólica es la fuente de diversos fenómenos visibles desde la Tierra, incluyendo las auroras (Luces del Norte y del Sur), las tormentas geomagnéticas, que es el más grave y puede dañar las redes eléctricas y poner astronautas en peligro, y las colas de plasma de los cometas.
El Sol emite alrededor de 6,7 millones de toneladas de energía solar eólica por hora, que suena como mucho, pero se convierte en prácticamente nada si se extendiera por toda la vasta extensión de espacio. Hoy en día mucha de esta energía se usa en la tierra por medio de los paneles solares.
Otras estrellas, especialmente las estrellas Wolf-Rayet, pierden mucho más de su masa al viento solar con el tiempo. Mientras el Sol requiere 50 billones de años de expulsión de toda su masa a través del viento solar, una estrella Wolf-Rayet sólo requiere alrededor de 100.000.
El viento solar es el fenómeno primario en el espacio por una distancia grande, pero no para siempre. La influencia de la energía solar eólica comienza cerca de 75 UA del Sol, donde la velocidad del viento solar disminuye de supersónica a subsónica. La sonda espacial Voyager 1 alcanzó el choque de terminación el 23-24 de mayo de 2005.
Los datos enviados de vuelta de sus sensores han dado a los científicos una mejor idea de cómo la dinámica de cambio cuando el viento solar no es la principal influencia sobre el medio ambiente del espacio local.
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